jueves, 25 de noviembre de 2010

De amor y de sombra

De amor y de sombra es una obra de la escritora chilena Isabel Allende, nacida en Lima (Perú) el 2 de agosto de 1942. En total ha ganado unos treinta premios, sin embargo destacan como los más importantes; la entrega de Doctor a Honoris Causa (2007) y el Premio Nacional de Literatura en Chile (2010). En 1973 hubo un golpe de estado donde su tío Salvador Allende murió. Su familia se auto exilió en Venezuela. Allí publicó su primera obra teatral La casa de los siete espejos. En 1981, le dedicó a su abuelo, en las puertas de la muerte, un manuscrito La casa de los espíritus, el cual se convertiría en el mejor trabajo de Allende.

Esta obra literaria fue publicada en 1984, en Venezuela, durante el exilio de Isabel y su familia, y la editorial es Plaza y Janes. Como antes he dicho, por esta época hubo un golpe de estado dirigido por Pinochet lo que obligó a muchas familias a exiliarse. Este libro contiene 281 páginas es del género narrativo puesto que es una novela.

El libro trae el índice al final, y divide la novela en tres partes (Otra primavera, Las sombras y Dulce patria) a las cuales le siguen a cada una, una frase de Violeta Parra, Vicente Huidobro y Pablo Neruda (siguiendo la cronología).

El tema principal de la novela es; los daños de la dictadura en Venezuela. Este tema sería el general porque luego se ciñe a contar un relato en el que se da un caso de desaparición. Todo comienza con una enfermedad de Evangelina, que atrae a muchos médicos, personajes eclesiásticos y periodistas a investigar el caso. Como en otros casos, la Guardia Civil se la lleva con la escusa de hacerle una interrogación, pero al ver que no vuelve empieza su búsqueda, en la cual Francisco e Irene (dos periodistas) se involucran en él, siempre con una mentalidad e ideología contraria al estado político de la época. En esta investigación ocurren varios sucesos que ponen en peligro sus vidas, sin embargo el haber estado tanto tiempo juntos les une más, tanto, que Irene termina con la relación que tenía con Gustavo (un militar), enamorada de Francisco y viceversa. Descubren que Evangelina fue hallada muerta en una mina (Los Riscos) junto con otros muchos cadáveres, seguramente asesinados por el teniente Ramírez. El problema es que la policía tiene mucho poder y en cualquier momento pueden acabar con las vidas de aquellas persona que publiquen la verdad ante todos, aun teniendo la ayuda del cardenal, la única solución de los dos es el exilio.
Los personajes principales son:

- Evangelina: Es la desaparecida que padece una enfermedad desconocida que le causa convulsiones y caer en un estado crítico, pero que al parecer da suerte.

- Irene: La periodista que investiga el caso de la desaparición de Evangelina, siempre fiel a sus creencias.

- Francisco: Es el ayudante de Irene tanto en el trabajo como en la investigación que desde un principio se siente atraído por ella.

Los personajes secundarios son:

- Digna: La madre no biológica de Evangelina, a causa de un fallo incorregible del hospital.

- Gustavo Morante: Novio de Irene y militar.

- Sargento Faustino Rivera: Es primo de los Ranquileo (familia de Evangelina), que acaba asesinado tras admitir a Irene el culpable de los asesinatos.

- Hipólito: Marido de Digna.

- Hilda: Madre de Francisco.

- Pradelio: Hermano de Evangelina que tras ser encarcelado (aun siendo policía), huye por los campos temiendo ser asesinado y en busca de su hermana.

- Profesor Leal: El padre de Francisco.

- Beatriz: Madre de Irene.

- Eusebio: Padre de Irene.

- Teniente Ramírez: Un policía, que al final parece ser el culpable de dichas desapariciones y asesinatos.

- Rosa: La sirvienta de Beatriz.

La novela se sitúa en un espacio abierto, ya que transcurre en muchos lugares del pueblo y también en las afueras. En cuanto al tiempo, no es lineal, puesto que hace unos saltos en él, contando historias pasadas de las familias de los Beltrán, los Leal y los Ranquileo.
Como antes he explicado el libro se constituye por tres partes, en los cuales hay capítulos sin numerar ni nombrar. El narrador se turna, es decir, en la mayor parte de la novela es omnisciente ya que narra la historia como si fuera una persona fuera de ella y conocedora de todo tipo de sentimientos y elementos invisibles. Pero en ocasiones, hay explicaciones y/o narraciones en los que el contador es un personaje (p.e. cuando a Rosa le nace el hijo muerto, la narradora es Irene).

La novela se hace muy larga de leer, aunque sólo tenga 281 páginas. He encontrado bastantes explicaciones de adorno, esto es, innecesarias y muchas ralentizaciones. Es más, creo que la novela transcurre en unas pocas semana. Había pocos momentos en los que el lector se engancha por lo cual era fácil cansarse en pocos minutos leyendo. Sin embargo el tema es interesante, porque saber cómo era la situación en esa época, en plena dictadura y en un estado post golpe de estado, es atrayente. Además, en algunos momentos, me he sentido reflejado en los periodistas, sobre todo porque se morían de intriga por saber la verdad igual que estaría yo. Por todo ello, el libro me ha decepcionado, aun sabiendo el tema anteriormente, pero es de esas novelas que te enriquecen verbalmente por lo que tampoco lo desaconsejaría.