“La calle de la judería” es la primera novela de Toti Martínez de Lezea, publicada en el 1998 por la editorial Ttarttalo, en Madrid. Cuenta con 487 páginas, y es una novela histórica.
La autora nació en Vitoria en 1949, y a sus 61 años sigue escribiendo todo tipo de obras. Empezó trabajando en Euskal Herria de traductora técnica, y compaginó su profesión con trabajos para teatro y televisión, donde escribió y dirigió más de mil programas infantiles. Ha escrito las novelas “Las torres de Sancho”, “La herbolera”, “Señor de la guerra” y “La abadesa”, entre otras. En el 2000 recibió el Premio Euskadi de Plata por el libro más vendido en la Feria del Libro de San Sebastián y en 2001 fue premiada con el Premio Pluma de Plata por ser la autora más vendida en la Feria del Libro de Bilbao.
La obra cuenta la vida de una familia judeo-conversa en la Vitoria del siglo XV. El tema religioso es uno de los pilares de la novela, explicando las dos principales religiones de la España de la época : el judaísmo y el cristianismo. Además, aparecen a lo largo de todo el libro temas de carácter secundario (el amor y el odio, la venganza, el poder) que se harán presente en los muchos personajes que toman parte en la historia.
La trama comienza con la presentación de tres de los personajes principales de la primera parte de la obra, los hermanos David y Yehudá , y su hermana Ruma. En un principio, es una familia judía en la que todos, a su manera, mantienen una relación con su religión. Pero, a medida que transcurre la historia, se dan varias conversiones al cristianismo, lo que produce un distanciamiento entre los miembros de la familia y la comunidad judía. Además, las medidas duras que toma la Inquisición y las persecuciones de los judíos y conversos pondrán en peligro a los miembros de esta familia. Durante la obra, aparecen tres generaciones distintas de la familia : la primera con David y Yehudá, la segunda con Yosef y Jonás y la última con Juan “el rico”. Todos estos personajes nos mostrarán una historia llena de amor, venganza y ansia de poder, en la que muy pocos conseguirán vivir en paz.
Son muchos los personajes que aparecen en la obra, pero, como la obra está dividida en tres generaciones, los protagonistas serían los siguientes :
- Yehudá/Fray Anselmo : Es el primero de los grandes protagonistas de la obra. Al comienzo de la obra, aparece como un apasionado de su religión, el judaísmo. Llega a ser el rabino de la comunidad judía de de Vitoria, pero por varias circunstancias, se convierte al cristianismo.
- David de Sahadia : Es el hermano menor de Yehudá. Se convierte en el médico más solicitado de Vitoria, hasta llegar a dirigir el hospital. A diferencia de su hermano, la religión no es fundamental para él, pero la conversión de este le acercará más a ella.
- Yosef : Es el hijo mediano de David. Es el principal protagonista de la obra. Mantiene relación y simpatía tanto por los judíos como por los cristianos, lo que le llevará a sufrir grandes problemas. Mantiene una gran enemistad con Escoriaza, quien buscará, por todos los medios, la ruina de la familia.
- Juan “el rico” : Es hijo de Yosef. A diferencia de su padre, adora el dinero y es muy ambicioso. Eso le llevará a forjar varias enemistades y a enfrentarse a muchos problemas.
La historia se sitúa en Vitoria, en el siglo XV. Para la ambientación, la historia cuenta con ricas descripciones de la calle de la judería y de sus casas y edificios. El tiempo de la novela es lineal, ya que comienza en el año 1404 y termina en el 1495. En este intervalo, se hacen grandes saltos en el tiempo, consiguiendo así que cuando nos adaptamos a una situación, esta da un cambio drástico. La obra presenta las tres partes claras de una novela : la introducción, el nudo y la desenlace. El nudo, a su vez, estará dividido en otras tres partes, dependiendo de el protagonista en el que se centra la obra. La novela está narrada en tercera persona, haciendo uso de un narrador omnisciente.
La calle de la judería es una novela histórica entretenida y se aprende mucho leyéndola. A mí me ha gustado mucho y me parece que trata un tema muy interesante, del cual no sabía muchos detalles. Se cuentan los hechos con gran precisión y sencillez, y eso es otra ventaja de la novela, desde mi punto de vista. Hay que recordar que la obra se sitúa en el siglo XV; por lo tanto, los personajes deberían tener una forma de expresarse acorde con la época. El hecho de plasmar en la obra la forma de hablar de hoy en día facilita muchísimo su lectura. Teniendo en cuenta todo lo anterior, recomiendo la lectura de “La calle de la judería”, sobre todo a los amantes de la novela histórica.
