sus amigos le hicieron a una chica. Después de aquello, siempre se sintió culpable por no haber hecho nada, y desde entonces fue un feminista convencido. Claro ejemplo de ello es la trilogía “Millenium”. Siempre fue muy luchador y estuvo comprometido con muchas causas: la protesta contra la Guerra de Vietnam, la lucha contra el racismo y la ultraderecha antidemocrática, militante de la Liga Comunista de Trabajadores... Llevó un modo de vida muy poco saludable, ya que fumaba mucho y le encantaba la comida basura. Por esta razón, falleció inesperada y trágicamente a la edad de 50 años de un ataque al corazón días después de entregar el último volumen de esta trilogía. La obra fue editada por la editorial española Destino en Barcelona. Posteriormente, se publicó en España en junio de 2009. El libro cuenta con 860 páginas y pertenece a el género policíaco. Para muchos lectores que la han leído, esta trilogía es hasta el momento la mejor obra en este género, y una de las mejores del actual siglo XXI. El libro cuenta con un total de 29 capítulos agrupados en 4 partes. Además, la obra cuenta con un epílogo muy interesante donde se desvela una de las incógnitas de la trama. Es muy difícil explicar el argumento de esta obra ya que se trata del tercer volumen de una trilogía, que por tanto hay que leer completa para entender lo que ahora voy a decir. Los que hayan leído el segundo volumen se preguntarán si Lisbeth finalmente muere o no. Como ya nos imaginábamos, no está muerta, aunque sí en un estado muy crítico. Tras recibir un impacto de bala en la cabeza, Salander está bajo una gran supervisión médica en el Sahlgrenska, donde además también está ingresado Alexander Zalachenko, quien no dejará de acecharla. Como si esto fuera poco, la protagonista se tendrá que enfrentar a un juicio por triple asesinato (entre otras cosas) en el momento en que le den de alta. Con la ayuda de Mikael Blomkkvist y sus colaboradores en la revista Millenium, Lisbeth tendrá que probar su inocencia ante el tribunal mientras prepara su venganza contra los que abusaron de ella y sus derechos. Son muchos los personajes que aparecen en la obra, periodistas, policías, espías... aunque los personajes principales son los siguientes
- Lisbeth Salander. La clara protagonista de la trilogía, se caracteriza por su gran inteligencia y su especial habilidad (memoria fotográfica) por una parte, y su dificultad para relacionarse por la otra (originado por su dura infancia). Además, es imprescindible comentar que es una de las mejores hackers de su país. Su terrible infancia y las consecuencias de esta son la base de los dos últimos volúmenes de la trilogía.
Mikael Blomkvist. Junto con Lisbeth constituyen el marco de protagonistas de la trilogía. Es un muy buen periodista, divorciado y un coleccionista de amantes. Su gran lealtad a sus amistades y su habilidad para encontrar historias y destaparlas lo convierten en el referente para desarrollar el interés hacia la trama.
Erika Berger. Co-propietaria junto con Mikael de la revista Millenium, es su principal amante, ya que llevan 20 años como tal. Es muy eficaz en su trabajo aunque en este volumen, se verá sumida en varios problemas en su nuevo puesto en el periódico Svenska Morgon-Posten.
La relación entre los personajes de la trilogía es muy compleja. Sabemos que Lisbeth es muy introvertida y que le cuesta relacionarse, pero aunque no quiera admitirlo existe un vínculo afectivo con Mikael, que se verá en repetidas ocasiones. Podríamos llamarlo una relación de amor-odio. Mikael, por su parte, reconoce que se siente muy unido a Lisbeth, bien sea por su amistad o tal vez por algo más. Como he mencionado anteriormente, Erika y Mikael llevan 20 años como amantes, hecho que lleva a que se necesiten mutuamente. Sin embargo, también podemos ver durante la obra que Mikael no se siente atado a ninguna de sus amantes (que son muchas), aunque al final parece que va a comenzar una relación seria con una de ellas.
La trama se sitúa en la Suecia actual, abundando así topónimos suecos a lo largo de toda la trilogía. La estructura temporal es bastante clara ya que durante toda la obra se hacen saltos hacia atrás (flashback) para reconstruir los hechos de la infancia de Lisbeth. En cuanto a la estructura de la obra, está bastante claro que “La reina en el palacio de las corrientes de aire” no es más que el desenlace de la trama de la trilogía, siendo el segundo volumen el principal nudo. Por esa razón, abundan las retrospectivas y las descripciones detalladas de personajes claves en la obra. Cada capítulo se divide en situaciones separadas por un espacio en blanco mayor de lo normal, en la que la historia se centra en uno o varios personajes. Al ser un libro tan voluminoso, existen muchas tramas secundarias y, por lo tanto, el autor va dando saltos de una a otra. La obra presenta un narrador omnisciente, ya que podemos apreciar todos los pensamientos, sentimientos y razonamientos de los personajes.
En mi opinión, un buen final para una trilogía muy entretenida. Es verdad que tal vez es el más lento de los tres volúmenes, pero el autor lo compensa con tramas muy intrigantes y descripciones muy interesantes a nivel cultural. Por esa razón, animo a que se lea esta brillante y entretenida trilogía, ya que es una de las obras más atractivas que he leído.
